Entre twitter y cumpleaños.

Hola, si ya, ni yo mismo me creo la constancia que estoy teniendo...

Veamos, ayer recuperé mi cuenta de Twitter, no es que me hubieran robado la contraseña, ni nada de eso, es simplemente que no la recordaba. El caso es que de momento no pillo bien el concepto, pues es como que de repente lanzas mensajes y o te contestan, o te retuitean o no pasa nada. Esta bien como desahogo:"Han subido los precios en Mercadona!" o: "Me he peleado con mi madre!! ui que rabia!" pero de momento, no le veo más.

Y si, en unas horas es el cumpleaños de Él, el caso es que es mañana, pero nosotros a las 0:00, tenemos la costumbre de sacar una tarta y beber algo de cava (él) y vino (yo)

Así que me he pasado la tarde buscando los regalos. Yo ya veía que iba a ser una tarea estrenaste, más que nada porque cuando he lanzado he enviado un WhatsApp a un grupo de amigas, buscando apoyo y palabras sinceras de: no hombrenoquevasairtarde:

"Hola! aun no tengo los regalos, ¿a que vivo al límite?"

Y cuando la respuesta ha sido que si, que iba un pelín justo, se me ha reafirmado la idea, refuerzos positivos de conducta, que dirían.

Grace, como siempre, me ha ayudado y hemos acabando cargando un paquete enorme desde el Gran Vía 2, que otro día hablaremos de ese centro comercial, que de lo barroco que es, le tengo hasta cariño, hasta el despacho. Lo de la tarde, lo de la tarde ya si que ha sido como una película de Cameron Diaz, terrible para vivirlo, graciosisimo para verlo.

Si has visto un tío en chandal, chaqueta de piel, cara de circunstancias, un pastel (claramente grande para dos) y una bolsa más grande que él, por plaza España, si, era yo.

0 Don't let me see mistakes and lies: